viernes, 30 de marzo de 2018

Viernes Santo 2018

Era ya la hora sexta, y vinieron las tinieblas sobre toda la tierra, hasta la hora nona, porque se oscureció el sol. El velo del templo se rasgó por medio. Y Jesús, clamando con voz potente, dijo: "Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu". Y, dicho esto, expiró.
Lc 23, 44-46
¡Oh santa Cruz de la esperanza!
¡Oh Cruz santa!,
mi Señor está en tu madero
en los dolores de su pasión.
Veo sus manos, sus pies,
su costado, traspasados
por los clavos y la espada.

Quien podrá alabarte lo suficiente,
a ti que has traído la salvación al mundo
y el consuelo para todos nosotros.

Tú eres el puente echado sobre la ola,
para que todos salten
las aguas profundas del río.

Tú eres la victoria brillante
tú has triunfado para siempre,
sobre el enemigo.

Tú eres el bastón del peregrino,
que se apoya en ti con confianza,
y nunca tropieza ni cae.

Tú eres la llave del paraíso,
que nos abre la puerta de la vida
que Dios, por ti, nos da.

Muestra tu fuerza y tu poder,
guárdanos todos juntos
firmes e la esperanza.

Y que en el día en que Dios ha elegido,
todos sus hijos reunidos
en la paz estén con él.

Amén



jueves, 29 de marzo de 2018

Jueves Santo 2018

Y se apartó de ellos como a un tiro de piedra y, arrodillado, oraba diciendo: "Padre, si quieres, aparta de mí este cáliz; pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya". Y se le apareció un ángel del cielo que lo confortaba. Y le entró un sudor que caía hasta el suelo como si fueran gotas espesas de sangre.
Lc 22, 41-44
¡Jesús Misericordioso, confío en ti!
Tu bondad es infinita, y no tengo miedo de nada.
Confío sin límites en tu misericordia.
Tú me acompañas en las dificultades,
y en las duras pruebas de la vida,
en la felicidad y en la desgracia,
en mi vida y en mi muerte, y en la eternidad.
Nada me asusta,
cuando te tengo en mi corazón.
Jesús abre mi alma a la esperanza.
Inclínate hacia mis pecados y mis miserias,
perdona mis faltas
y purifica mi corazón.
Me consagro a ti,
con el fin de vivir y de tender a la perfección
y de glorificarte aquí abajo y en la eternidad.
Jesús misericordioso, tú eres mi fuerza y el dulce reposo de mi alma,
tú sabes bien quién soy, temo todo de mi debilidad,
pero al mismo tiempo,
espero obtener todo de tu inagotable misericordia.
Transfórmame en ti, porque tú puedes todo.
Santifica mis acciones, para que merezcan la eternidad.
Aunque sea grande mi debilidad,
tengo confianza en el poder de tu gracia que me sostendrá.
Pongo mi confianza en ti, ahora y por siempre
y sobre todo en la hora de mi muerte.
Amén.


Guias Semana Santa 2018

Semana Santa Albacete 2018

Semana Santa Albacete y Provincia

Heridas que nos han curado

Salió de tu costado sangre y agua: dolor y bálsamo. Salió de tu costado amor y ternura, contagio y limpieza. Contagio para empuje y espabilo, capaz de enviarnos a salvar, limpieza para borrar todo lo violento, egoísta y sucio.

Quiero sentir la gota que me limpie y me envíe a limpiar: Quiero escurrir por mis manos la gota que purifica e impulsa. Quiero también sentirme impulsado a limpiar y ayudar.
Voluntario para dar gotas de consuelo y de alivio, voluntario para repartir las gotas difíciles de la paz, voluntario para sembrar y regar las semillas de justicia.

Voluntario para calmar con muchas y continuas gotas de amor cada rincón de cada llano y amargura, voluntario ara seguir curando cada cruz desde mi cruz, cada cruz desde tu cruz Gloriosa y sangrante.
Siempre cura la entrega generosa y desinteresada. Siempre cura una donación de tiempo y de constancia. Siempre cura la gota de agua sincera y humilde.

Muchas gotas de agua mansa y nunca violenta, muchas gotas de oración callada y de testimonio que clama, muchas gotas de una fe más presente y comprometida.
Tus heridas, Señor, nos han curado, pueden curarnos. Tus heridas Señor, siguen sangrando pavorosamente gritando. Tus heridas Señor, iluminan el sinsentido de la guerra absurda.

Tu agua nos limpie de cegueras. Tu agua nos cambie en hermanos. Tu agua y tu sangre nos envíe como voluntarios. Voluntarios de tu mismo amor generosa, roto y entregado.

Juan Miguel Romero